Mi kabbala – 12 Nisán 5784 – viernes 19 de abril del 202

¿Plagas?

El Texto de Textos nos revela en Isaías 19:22, “y el Creador herirá a Egipto; herirá pero sanará; y ellos volverán al Creador, y Él les responderá y los sanará”.

Los eruditos consideran que nuestros niveles de desarrollo dependen del deseo de recibir מְקַבֵּל mekabel el cual evoluciona continuamente desde lo físico, enfocándose en lo que el cuerpo necesita para luego pasar por lo mental que vislumbra necesidades para finalmente llevarnos a lo espiritual, a estar al lado de nuestro Creador fruto que aprendemos que nuestra existencia depende plenamente de Él, de quien necesitamos absolutamente todo. Desde esa mirada la Biblia está llena de simbologías que nos ayudan a comprender estos y otros misterios, algunas de ellas disfrazadas en números y otros signos que nacen de las letras hebreas originales, las cuales nos incitan en su todo a la oración.

Los diez mandamientos como enunciados de la creación del mundo, concuerdan con las diez generaciones desde Adam hasta Noe y luego de Abraham nos llevan a Moisés y las diez plagas que traducen las diez Sefirot o emanaciones de la presencia del Creador en este mundo. Conceptos que nos ofrecen la opción de ser guiados y obedecer ya que todo signo le da un sentido a ello, denotándonos la presencia del Creador en cada partícula de este mundo en donde la misma naturaleza nos habla de Él, señales אוֹת, oth, que con sus destellos llaman nuestra atención para que le conozcamos e integremos.

Diez emanaciones que al igual que esas diez plagas egipcias nos recuerdan la necesidad de mantenernos en un estado de moralidad y fe acorde a lo proyectado por el mismo Abraham, siendo estos mandatos guía para nosotros sus descendientes. Y es que en un mundo idólatra como el nuestro, lo cual nos distancia del Creador, שָׁגָה shagah, en donde cada quien tiene su propio dios, suponiéndonos independientes y diferentes, se hace necesario que cada espacio seudo espiritual nos recuerde que somos hijos y no súbditos del pecado a merced de los caprichos y celos de nuestros egos.

Palabras como Néga נגע, llaga, plaga, golpe, choque, parecen similares a Oneg עונג, placer o deleite, para recordarnos que si nuestros placeres no nacen del Creador nos pueden generar dolor, siendo las plagas de advertencia para que esas pruebas sirvan de recordatorio al respecto de la justicia y piedad divina de nuestro único Creador el cual a través de sus preceptos nos otorga todo un aliciente cuando nos acogemos a sus llamados evitándonos así que caigamos en esa asimilación que nos lleva a adorar falsas deidades y a olvidarnos de nuestro dador de vida.

Las diez plagas, no deberíamos entenderlas como un castigo, ya que desde su progresión correcta nos denotan el poderío del único Creador y Señor de todo, por lo tanto así como la muerte del hijo y del mismo Faraón sirvió como ruptura definitiva de una dinastía que había considerado como propiedad suya a los Hijos de Israel, nosotros probablemente necesitamos romper con todo aquello que nos desvía de nuestro camino original y quizá para ello se hace necesario que sigan aconteciendo este tipo de llamados de atención.

El Texto de Textos nos revela en Mateo 26:31, “entonces Jesús les dijo: Todos vosotros os escandalizaréis de mí esta noche; porque escrito está: Heriré al pastor, y las ovejas del rebaño serán dispersadas.32 Pero después que haya resucitado, iré delante de vosotros a Galilea”.

Oremos para que todo nos denote cuál es el camino correcto a seguir.

Mi kabbala – 12 Nisán 5784 – viernes 19 de abril del 202
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