EPISODIO XXIX
TOREANDO
“Un arte que no lo es…”
TORERO
Guayacán
Interpreta:
Compositor: Nino Caicedo
Tarde de sol, toro y arena…. Hay grito de feria en Cali… No fuí … ni soy amante de la tauro magia… pero no por ello… puedo negar que acompañe a muchos amigos que veían en esta todo un arte… se enfrentan en fiel alid… bravo torero!… La lista de nombres con las que compartíamos las festividades decembrinas en la plaza es tan larga… que prefirieron con este recuerdo evocarlos a todos, incluso a aquellos con los que casi nunca compartí…. Señores… no es andaluz, perdone, no es sevillano… Más no con esta introducción y este tema… estoy defendiendo algo que siempre me pareció cargado de mucha violencia … y además de una enorme presunción egocéntrica y vanidosa de nuestras sociedades mercantiles…. de toros, música y rumba… mi Cali zumba… en esas famosas corridas los asistentes … intentaban lucir sus mejores pintas… sus trajes de luces… o así los presumían… además de exponer a esas sus damas como si fueran trofeos … mientras en las graderías todos estaban dispuestos a gritar un ole … sin saber el significado real de aquel termino… todo sea hacia simplemente porque había que hacerlo… y como a mi me parecían grandes absurdos poco o nada asistí a estas faenas…. Hay sangre en la arena y no es del torero… Ay qué torero… Por ello y más allá de las criticas … que puedo proferir al respecto … de aquellos días quiero recordar a esos amigos … así como todos esos momentos compartidos … en donde se trabajaba para una audiencia… pero a la vez se degustaba de compartir…. Las mujeres lindas gozan por la quinta… de feria y rumba…. Fueron días que recuerdo con especial agrado en donde mis expectativas estaban más ligadas al compartir que al competir… días en donde la lidia era más sencilla… diría yo utilizando algunos términos de la jerga taurina… eran otros días… distintos a estos en donde la vida tiene como otras ganaderías…. Unas en donde incluso se restringen para mi muchas cosas… unas en donde se incluyen estas y otro tipo de actividades… en fin… solo nos quedan los buenos recuerdos… esos que también incluyeron cachos, rabos y hasta jalones de oreja…. Los hombres de Cali si son caballeros… gente decente… al final queda ello… las vivencias… las mismas que hicieron de esos días …. fechas inmemorables… especiales… en donde se trabajaba con gusto … y hasta con el deseo que esos días no pasaran tan rápido…. Merece rabo, rabo y oreja… Ay qué torero!… las cosas han cambiado y acepto que lo expreso con algo de nostalgia… más hoy sigo toreando… pero en otros escenarios … y tras otros motivos … ya no hay toros… ni banderillas… ni sangre… ni siquiera toreros amigos … en estos días… la plaza está llena de otros objetivos… lo único que si continua… es que sigo sacando el capote para cantarme mis propios oleeeees…. De la plaza a la caseta… Por ello y aunque nadie me aplaudirá… y ya no me tienta el recibir un rabo… con la convicción que tampoco apareceré … ni en los carteles de los más buscados… a duras penas permaneceré en los de data crédito … así como en las centrales de riesgo bancario… hoy me declaro el último de los toreros colombianos … y sabiendo que no tengo afición … ni nadie que me admire… siento que estoy llegando al final de mis días tan solo con esos recuerdos maravillosos… todos cargados de esos mismos buenos amigos … que quizá en el más allá me reconocerán porque fui un buen torero… repito… de la plaza a la caseta… con Cali nadie se meta…