Mi Kabbala – Adar 25, 5783/Viernes 17 de Marzo del 2023

¿Mandato? 

El Texto de Textos nos revela en Lamentaciones 3:22, “El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota”.

Los creyentes siguiendo el ejemplo de los apóstoles debemos actuar de tal forma que invitemos a nuestros hermanos a seguir a Jesucristo, confiando incluso en que si Él puede alimentar con cinco panes a toda una multitud, su mensaje puede ayudar a un mundo que convive con problemas graves fruto de la falta de amor, quizá por ello siempre Él nos insistió que el mayor mandamiento de la Torá se encuentra en amarnos, ya que el amor como fluir es la idea central que hay detrás de la mayoría de todas las enseñanzas Bíblicas. 

Amor que es mucho más que afecto o sentimiento y que nace de una relación fraternal, ahav, אהב, tres letras de las cuales dos: alef, א, jefe, bet y ב, casa, significan padre, abba, y allí es donde la tercera letra, heh, ה, complementa el concepto para simbolizar al Espíritu del Creador, siendo así el amor la esencia de Él. Amor que es la forma en la que el Creador se manifiesta en el mundo y quizá por ello, quienes se confunde hablando del amor que María Magdalena le tenía a Jesucristo obvian los verdaderos propósitos de esta relación.  

Recordemos que María Magdalena era integrante del círculo íntimo de seguidores de Jesucristo, pero no hay que perder de vista que su verdadero nombre no era María, sino Miriam, como uno de los nombres femeninos más comunes en la sociedad judía del primer siglo, siendo esta Magdalena no un apellido, sino una relación con su lugar de residencia: Magdala, un pueblo de pescadores en la costa occidental del Mar de Galilea, nombre que significa torre, en referencia a un monumento destacado de la ciudad.

Se duda incluso que ella fuese la prostituta perdonada por Jesucristo, sino que era una respetada integrante de la clase alta judía que gracias a la industria pesquera se había hecho rica en Magdala por lo cual aportaba sus recursos para la misma manutención de Jesucristo y su apostolado, pero quizá para quienes se cuestionan de su relación y por qué Jesucristo se le apareció primero a ella luego de la resurrección, olvidan que todo tiene que ver con la expulsión que le hizo de sus siete demonios o sea que ella misma conocía el mismo infierno y podía predicar con más certeza al respecto de este y del amor que desde esa mirada se debe profesar.

Lo que quiere decir que el mandato del amor del Creador para nosotros tiene que ver con alejarnos del infierno en que hemos convertido nuestras relaciones y resucitar a una nueva realidad en donde no es el dinero nuestra principal búsqueda, sino el amor que como vinculo perfecto implica que nos integremos a aquellos a los cuales en ocasiones despreciamos o de quienes nos aislamos y así asimilar que solo el amor puede salvarnos ya que es el fluir perfecto para integrarnos al Creador a través de su obra.  

El Texto de Textos nos revela I de Juan 4:18, “El que teme espera el castigo, así que no ha sido perfeccionado en el amor”.

Oremos para que el amor guie nuestras relaciones. 

Mi Kabbala – Adar 25, 5783/Viernes 17 de Marzo del 2023
Scroll hacia arriba