¿Recrearnos?
El Texto de Textos nos revela en Genesis 2:18, “Y dijo el Señor nuestro Creador: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él”.
La palabra crear nos ofrece como cualquier otro termino diversos significados, algunos incluso tan distintos que podría pensarse que llegan a oponerse, probablemente por ello cuando hacemos referencia a una expresión cualquiera no podemos quedarnos con un único significado, así este nos parezca general, sino que como creyentes por ejemplo debemos profundizar un poco para poder asumir los otros contextos a los que este también puede estar haciendo algún tipo de referencia divina. Y es que los seres humanos fuimos creados por un ser amoroso quie nos permite en el fondo recrearnos en Su obra.
Desde esa mirada cuando se lee el concepto del cómo Adán y Eva nosotros también hemos sido creados, debemos interiorizar esa palabra del hebreo original para poder entender que existe una profunda diferencia bastante significativa al respecto de lo que tradicionalmente asumimos gracias a ese término. Cuando Adán fue creado, se usa el verbo yatzar, יצר, que significa Él modeló, y es el mismo verbo que aplica para un alfarero que modela cuencos de arcilla, por defecto, el verbo yatzar es la palabra para la creación divina, y aparece varias veces en los primeros capítulos del Génesis.
Adicionalmente y para el caso de la creación de Eva, se utiliza el verbo baná, בנה, que significa Él construyó, siendo este el único momento en la Biblia en el que la palabra construir se podría entender cómo crear, ello, porque el verbo baná, בנה, está relacionado con la palabra biná, בינה, que significa inteligencia. Lo que llevado al contexto actual nos demuestra que desde el principio la mujer fue dotada de un sentido superior del conocimiento ya que podía procrear.
Lo que en su todo nos invita a comprender que nuestra inteligencia, que tiene que ver con la sabiduría que viene de Él, nos sirve para recrearnos en todo lo creado usando ese don como nuestra mayor herramienta. Insumo que nace de Su palabra a través de la cual procesamos esa nuestra inteligencia para poder no solo reproducir ese conocimiento sino además reconocernos como sus hijos. Lo que quiere decir que Él nos hizo con un modelo mental que aunque ahora esta confundido por el pecado debemos reorientar hacia esos sus propósitos, los cuales nos llevan a recrearnos en Él.
Seguir usando lo que denominamos como creatividad simplemente como un insumo para fomentar nuestros libertinajes no solo es un acto de mal uso de esa inteligencia, sino que a la vez una demostración de perdernos de ese molde original, el cual con sus preceptos y mandatos debe reorientar nuestras coexistencias o de lo contrario nos seguiremos recreando en todo aquello que poco tiene que ver con el Creador, así que la vida nos llama la atención para que en vez de creernos lo que no somos, creamos en Él y a la vez le creamos para que nos dejemos guiar por su Santo Espíritu.
El Texto de Textos nos revela en Hebreos 3:4, “Porque toda casa tiene su constructor, pero el constructor de todo es el Creador”.
Oremos para que nuestra creatividad sea guiada por el Creador.