Mi Kabbala – Shevat 11 del 5783/Miercoles 1 de Febrero del 2023.

¿Alabamos? 

El Texto de Textos nos revela en II de Samuel 7:2, “¡Qué grande eres, Señor omnipotente! Nosotros mismos hemos aprendido que no hay nadie como tú, y que aparte de ti no hay Creador”.

Alabar al Creador  להלל lehalel,  es mantenernos en posición de denotarle esa inmensa gratitud que sentimos como fruto de entender que Él nos regaló la vida y gracias a ello tenemos el placer de degustar de toda Su obra para lo cual dispuso para nosotros esta, denotándonos así que Él se satisface con nuestras vidas pero más con los frutos que a través de esta damos. Razón de peso para que aprovechemos cada momento para recrear con nuestras palabras todo lo mejor que brota de nuestros seres. 

Desde esa lectura hay quienes ven en esos destellos de sabiduría la invitación a unirnos como cuerpo y alma que se funden, lo que da lugar a nuestra humanidad, accionar que hace que igualmente hombre y mujer se unan en una de las fuerzas más poderosas del universo: el amor. Bajo esa perspectiva el mes de Shevat u once a partir de Nisan del pueblo Judío, representa para dicho credo una especie de balde que no s da la posibilidad de recoger, ello debido a que en la tierra de Israel al comenzar este mes, ya ha llovido lo suficiente para que todos los pozos y manantiales estén a punto de desbordar. 

Amor que como fuente se representa con el número once, siendo este el primer llamado de los números maestros para que logremos una introspección que parte de nuestra intuición para ser más espirituales, simbología que debe de acuerdo a la gematría nos llama a iluminar nuestros seres convirtiendo ello en una motivación constante para alabar y a agradecerle al Creador por todo lo que nos revela a diario a través de nuestras existencias.

Perspectiva que nos insinúa la importancia de ser más gratos y así alabar al Creador con cánticos y adoraciones en donde le demostremos lo mucho que valoramos todo lo que nos da a través de la vida así como los útiles que queremos ser a sus propósitos colocando nuestros dones a su servicio para que así en nuestros entornos podamos al unísono entonar los Iehudím, símbolo Judío de ese agradecimiento al Creador por salvarnos y es que como creyentes debemos tener en cuenta fiestas como el Bishvat o el Rosh Hashana de los árboles, en donde se nos invita a descubrir al Creador a través de todo lo que nos rodea.

Es tiempo de alabanza agradeciéndole así por los frutos diarios esos que acompañados por la lectura de la Torá nos deleitan con su aroma, enalteciendo nuestros seres e iluminando nuestras conciencias provocándonos buenas acciones para que en nuestra interacción con la sociedad mantengamos esa buena relación con nuestros prójimos, de allí la importancia de perpetuar estas costumbres de alabar y orar para que el Creador con su savia nos eleve cual árboles, razón de peso quizá para que se prohibiera que en medio de una guerra contra otro pueblo, se destruyeran los árboles frutales de esa región Asiática. 

El Texto de Textos nos revela en II de Corintios 9:7, “cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque el Creador ama al que da con alegría”.

Oremos para alabar con nuestras permanentes acciones al Creador. 

Mi Kabbala – Shevat 11 del 5783/Miercoles 1 de Febrero del 2023.
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