¿Yugo?
El Texto de Textos nos revela en Isaías 10:27, “Y sucederá en aquel día que la carga de Asiria será quitada de tus hombros y su yugo de tu cerviz, y el yugo será quebrado”.
El concepto de yugo nos lleva a suponer una carga, una que desafortunadamente muy pocos quieren llevar, ello quizá debido a que a algunos términos les traduzcamos desde otros contextos distintos a dicho modelo de pensamiento divino, alejándonos de percibir esas analogías que incluso a través de Alef א, nos hablan del Buey y su fuerza, por lo cual no podemos negar que ese término lleva implícito esa visión suprema de liderazgo, la misma que quizá le da a esa letra para quienes así lo quieren interpretar ese aspecto pictográfico que nos llama a ser fuertes a asimilar nuestro yugo ya no como esa carga.
No podemos obviar que de acuerdo con una parte de la tradición judía ortodoxa, las letras del alfabeto están dotadas de un valor especial, que va desde el significado de cada una hasta la explicación del vínculo con lo divino. Es por ello que la Cabalá o mística judía si así se le prefiere llamar, que se encarga de estudiar a fondo el significado de cada letra, utiliza dichos números acorde al método que propone la Gematría en donde cada signo con su valor y la combinación de esta nos aporta elementos para analizar los significantes de ca palabra siendo Alef correspondiente al número uno y por ende se asocia al Eterno.
Lo que analógicamente nos lleva a vislumbrar otra enseñanza tanto en esa letra como en el Buey el cual al arar la tierra, solo o en compañía, está sujeto a un yugo, siendo el buey más viejo, el líder, Alef, quien ya está enseñado por su amo a hacer el trabajo, el otro, el más joven es el que está en el proceso de formación, de liderazgo y para ello debe estar sujeto al líder, de tal manera que no pueda salirse de los límites ni a aumentar ni a desacelerar el paso, de allí la importancia de ese yugo, que nos enseña y del cual nuestro Señor Jesucristo nos expresó la importancia de seguirle, sometiéndonos a ese orden divino.
Se trata en todo caso de intentar llegar a la finalidad y el conocimiento de las concepciones de vínculos con lo divino y sus misterios, lo que los creyentes hacemos a través de la oración y la guía del Espíritu Santo. Búsqueda que solo tiene el propósito de encontrar en esa riqueza de información los fundamentos e insumos espirituales para nuestra cotidianidad, por lo que entendiendo o no la letra álef así como la bet ב casa, estamos llamados a ver en el Creador al líder de lideres, el número uno, quien guía nuestras vidas y nos da nuestro diario sustento, en fin, a quien debemos ofrecer no solo nuestro trabajo sino nuestras vidas para poder retornar una vez asimilemos nuestras cargas a nuestra casa.
Qué bello que logremos decodificar de cada letra, de cada párrafo, de cada versículo, en fin, de los Textos Bíblicos toda esa sabiduría divina allí encriptada y que requiere no solo de un estudio profundo sino sobre todo de nuestra oración para lograr la guía del Espíritu Santo quien debe aclarar nuestras almas, para que así nuestras mentes iluminadas por ese Haz de Luz reciban esos nuevos conocimientos que a su vez nutren nuestras diarias búsquedas para no dejarnos guiar por un mundo cada vez más alejado del Creador y de ese yugo que le da razón de ser a nuestras coexistencias.
El Texto de Textos nos revela en Mateo 11:29, “Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas”.
Oremos para asumir con alegría el yugo que significa que Él nos lidere y guie.