¿Confundidos?
El Texto de Textos nos revela en Nehemías 9:30, “Sin embargo, tú los soportaste por muchos años, y los amonestaste con tu Espíritu por medio de tus profetas, pero no prestaron oído. Entonces los entregaste en mano de los pueblos de estas tierras”.
La cábala y la gematría nos denotan a través de las letras hebreas originales y sus destellos de luz esos elementos simbólicos que con sus combinaciones nos proyectan nuevas interpretaciones para nuestras búsquedas cotidianas de reconectarnos con Él, siendo Hei ,ה unida a la letra Vav ו, que significa hijos y a la vez fusionada con Yod י, Padre o Abba una demostración de cómo se nos invita a través del Hijo a volver al Padre, lectura que deberíamos realizar, pero que fruto de nuestras confusiones lingüísticas no hacemos.
Cada letra es más que un signo que se fusiona con sus simbologías para generar una palabra, una imagen, un concepto, una decodificación que le da un sentido y no otro a nuestros pensamientos, por lo que estas tres letras no solo nos hablan de retorno, de arrepentimiento o de la corrección de nuestros pecados, sino además de obedecerle nutriéndonos de su Palabra que es la única que puede iluminar nuestros entendimientos siendo ese llamado de atención permanente de nuestro Creador la constante para que nos alejemos además de conflictos, enfermedades y resentimientos.
Somos fruto de la Palabra creadora, de Su narración, por lo que son nuestras palabras las responsables de nuestras vivencias interiores, lo que implica que debemos orar más para que su amor y misericordia nos guíen y así vivamos agradándole y no agrediéndonos, bendiciendo y no maldiciendo, lo que significará lógicamente que nuestros pensamientos y acciones sean motivados por Su luz y nuestras realidades dejen de ser confusas, caóticas y desordenadas ya que bebemos de esa fuente de vida que es Su palabra.
Cambiar nuestras palabras buscando que sean más fraternales es el camino que nos puede llevar a valorar esta vida como algo único en donde el mismo Creador está tratándonos con su amor para que logremos desprendernos de todas las impurezas de nuestros confusos lenguajes haciendo que estos contaminen nuestro ser como producto de desconectarnos de Él siendo necesaria la mediación de Su Espíritu רוח, para que este sea el aliento que motiva todo nuestro ser y por lo tanto cada vez estemos más aferrados a Su Haz de Luz.
Seguir como en Babel queriendo coexistir sin Él y suponiéndonos desobedientemente independientes de Él solo nos ha llevado habitar en el reino de la muerte, enfocándonos en placeres terrenales egoístas y obviando el objetivo trascendente de integrarnos a Él a través de Su obra, siendo necesario para ello no solo revisar nuestro lenguaje sino el transformarlo para que a partir de esa nueva comunicación directa con É, recibamos Su guía, la misma que nos debe al ser llenos de Su amor el irradiar este en todos esos entornos de vida que antes por nuestro lenguaje confuso convertíamos en espacios de conflictos e ingratitud.
El Texto de Textos nos revela en I de Corintios 2:10, “Pero el Creador nos las reveló por medio del Espíritu, porque el Espíritu todo lo escudriña, aun las profundidades del Creador”.
Oremos para que nuestras palabras sean inspiradas por el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.