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Mi Kabbala – Kislev 5, 5785 – Jueves 5 de diciembre del 2024.

¿Números?

El Texto de Textos nos revela en Zacarías 3:9, “Porque he aquí aquella piedra que puse delante de Josué; sobre esta única piedra hay siete ojos; he aquí yo grabaré su escultura, dice Jehová de los ejércitos, y quitaré el pecado de la tierra en un día”.

Los números contienen un significado profundo, siendo Él el uno, ejad אֶחָד, perspectiva que desde la gematría nos llama a integrarnos con nuestro Creador, unidad, para la cual no necesitamos de enredarnos en fórmulas complejas en pro de atender sus revelaciones, simplemente el asumir desde nuestras limitadas y sesgadas palabras, que en todo esta Su esencia y que la mejor forma de develar esos misterios de vida simplemente es aceptarlos con fe, la misma que nos explica de forma elemental ese para qué de nuestras coexistencias: integrarnos a Él.

La Gematria  גימטריה‎, que no es numerología, nos presenta a través del valor de cada signo lingüístico y sus combinaciones una mejorada interpretación de sus manifestaciones, siendo la tesis (0), el punto de origen (1) y la antítesis o no fuerza 2, (שְׁנַייִם shnayim), la síntesis 3, (shlosha שָׁלוֹשׁ), la fuerza de los estados de la materia el 4, (אַרְבָּעָה arba´a), el redescubrirnos gracias a estos elementos: aire, fuego, tierra o agua, esencia de ese Ser único el 5, (jamisha  חמישה) y aunque dudamos 6 (shisha שישה), reproduciendo desconocimientos, nuestro triunfo 7 (shiv´a שִׁבְעָה) está en hacernos conscientes de la vibración de su palabra: movimiento 8 (shmona שְׁמוֹנָה) con el que podemos elevarnos hacia nuestra victoria 9, (תִּשְׁעָה tish´a).

Lecturas cabalísticas que nos llevan como creyentes a aprender más de todo y de todos hasta comprender mejor esa realidad espiritual que a través de estos signos, símbolos, decodificaciones y señales, revestida de imaginarios, le da luces a nuestro entendimiento para que busquemos esa trascendencia, la misma que le irá otorgando un mayor significado a todo lo que hacemos, somos y por ende a nuestras coexistencias, gracias a seguir aprendiendo, lilmod, ללמוד, con estos insumos lingüísticos.

Gedeón, גִּדְעוֹן Giḏʻôn, como humilde guerrero, nos pide comprender que hay solo uno, concepto que además nos aporta nuevas motivaciones para obviar todos esos recuerdos nuestras pecaminosos y permitirnos con estas nuevas conceptualizaciones el redimirnos gracias a Él quien se humano para alterar nuestras vivencias e invitarnos a ser uno con Él, en vez de seguir queriendo sumar circunstancias en donde se nos quita la posibilidad de descifrar los verdaderos significados de nuestras diarias búsquedas.

Son conceptos, visiones, codificaciones, creencias, posturas y formas de entender la vida que pueden ayudarnos a ir un poco más allá de nuestro limitado lenguaje para con otras simbologías e imaginarios, צֶלֶם (tzelem) atender no unas nuevas creencias o mitos, sino las manifestaciones del mismo Creador, las cuales debemos darnos ese sentido trascendente para integrarnos a través de Su obra, atendiendo Su Palabra la misma que va más allá de símbolos, llevándonos gracias a la fe en quien nos creó que podamos ser guiados por sus preceptos y mandatos, lenguaje del amor del que poco hablan las ciencias exactas pero al que si nos inducen de forma directa tanto los signos lingüísticos como los números.

El Texto de Textos nos revela en Apocalipsis 1:4, “Juan, a las siete iglesias que están en Asia: Gracia y paz a vosotros, del que es y que era y que ha de venir, y de los siete espíritus que están delante de su trono; y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra”. 

Oremos contando nuestros instantes para lograr estar cada vez más cerca de Él.

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