Mi Kabbala – Shevat 26 – 5785 – Ñunes 24 de febrero del 2025

¿Vigilia?

El Texto de Textos nos revela en Isaías 30:21, “Entonces tus oídos oirán a tus espaldas palabra que diga: Este es el camino, andad por él; y no echéis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda”.

Entender el concepto de vigilia, משמרת, desde el hebreo original, nos lleva a visionar una división entre el día y la noche, una especie de medida cósmica, así dentro de nuestra cosmovisión lo interpretemos como un estado consciente de alta actividad que nos invita a estar muy atentos, motivando así buena parte de nuestras funciones neuro cognitivas superiores, estadio, en el que podemos percibir mejor algunas informaciones, tanto internas como externas, que están a nuestro alrededor y que en otros momentos simplemente pasan desapercibidas y por ende ni siquiera les consideramos.

Regularmente nos encontramos en un estado inconsciente que parece estar más vinculado a nuestros ciclos de sueño, que al de vigilia, por lo que la justa medida nos llama a estar despiertos desde nuestra esencia, cogobernando nuestro ser, tarea que implica que nuestras actividades conscientes sean las que predominan logrando que todas las ondas que fluyen en nuestro cerebro y a nuestro alrededor nos permitan captar esos mensajes que cual manifestaciones del Creador, alteran nuestra razón, emoción y corazón, לֵבָב, lebáb, consolidando la armonía que se requiere para vivir por y en Èl.

Cada jornada de sueño es un anticipo de la muerte, sueño eterno, que nos llama a tomar las riendas de la visa para que esa realidad virtual, כְּלִי kelí, vasija o mente, no predomine con sus reacciones inconscientes, nivel en el cual permanecemos cual sonámbulos con una mínima capacidad volitiva en donde incluso nuestro lenguaje y sus imaginarios nos justifican dicho estadio cuando tenemos la capacidad de colocar esa actividad eléctrica neuronal en ese otro nivel acercándonos cada vez más a la dimensión divina siempre y cuando nos alineemos a Él gracias a la guía del Espíritu Santo.

Salir de ese estado de sueño inconsciente que nos condiciona, es un llamado a despertarnos desde el alma, elevándonos hacia otro tipo de sensaciones, que visionamos incluso como sueños cuando hasta nuestra actividad muscular nos clama porque nos reactivemos y alejándonos de este estado de pereza busquemos una verdadera relación al lado del Creador en donde nuestras ondas alfa o theta se hagan incluso más lentas para poder descansar en Él, fluyendo armónicamente para que esa otras alteraciones terrenales no apaguen ese nuestro fuego, אוּר, ur, interior, que es vida.

Jonás יונה, nos recuerda que hay diversas dimensiones y estadios de conciencia así como tipos de ondas electromagnéticas que además de alterar nuestro ritmo cardíaco o presión arterial afectan nuestros pensamientos y relaciones, por lo que asumamos conscientemente el entender en que ciclo de vigilia debemos estar para que nuestra alma asuma el cogobierno de todas esas faces y ciclos, hasta llevarnos a estadios más allá de esta vigilia terrenal logrando colocarnos en frecuencia con esa otra verdadera realidad espiritual, la cual nos ofrece aquí y ahora nuestro Creador.

El Texto de Textos nos revela en Romanos 13:11, “Y haced todo esto, conociendo el tiempo, que ya es hora de despertaros del sueño; porque ahora la salvación está más cerca de nosotros que cuando creímos”.

Oremos para que permanezcamos despiertos a la guía del Creador.