
Perla Cotidiana – Vino?
Al derramar Su sangre (dam, דָָם) permitió la purificación de la nuestra.
Él es ese esposo desde las bodas de Caná (Kidushín, מסכת קידושין) que lo da todo por su esposa: la iglesia.
Él quiere que nos embriaguemos, pero con el vino purificador de Su amor.
Su sacrificio (זֶֶבַח, zebaj) elimino cualquier obra humana de perdón ya que todo es cuestión de fe.
Cuentan, que la primera vez El murió por nuestro pecado, regresará a dar muerte a los pecadores.
Su cuerpo es la copa (כּוֹס, kos) a nuestra diaria disposición para beber de la Fe redentora de Su sacrificio en la cruz.
Isaac (יִצְחָק, Yitzhak) nos llama a entender que Él fue el cordero que se inmolo por nuestros pecados.
El Texto de Textos nos revela en Lucas 22:20, “de igual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama”.
Amemos nuestras cotidianidades, transformándonos..!